Estimable radioescucha escucha canciones de
The Rolling Stones en Radio Mezcalito. A principios de 1966
Las Piedras Rodantes continuaba siendo considerada una banda inglesa que se limitaba a reciclar canciones de Rhythm & Blues. Mick Jagger y compañía ya habían mostrado su propia capacidad creativa al publicar canciones como "Satisfaction" y "19th Nervous Breakdown" obteniendo gran éxito de ventas, pero hacia falta una prueba contundente de que musicalmente podían llegar a ser tan competitivos como sus rivales de Liverpool. La evidencia emergió con la publicación del disco
Aftermath en abril de 1966. El nuevo álbum, grabado en los estudios de la RCA en Hollywood luego de una polémica gira por tierras del Tío Sam, fue el primero del conjunto en donde todas las piezas fueron compuestas por el dúo Jagger-Richards. A pesar de haber sido grabado en tan sólo dos sesiones durante diciembre de 1965 y marzo de 1966, el fonograma resultante conformado por 14 temas resultó ser el trabajo más sólido del conjunto hasta ese momento. El álbum esta impregnado de una atmósfera musical cohesiva, unificada, enriquecida por el uso de instrumentos que anteriormente no estaban relacionados con el pop o el rock. En cuanto a las letras de las canciones, los temas abordados son provocadores, polémicos y en algunos casos exhiben una virulenta misoginia. La hostilidad hacia el sexo femenino se deja sentir en rolas como
Under My Thumb,
Stupid Girl y
Out of Time, que con el tiempo otorgó a
Los Stones la fama de "chicos malos del rock". Esa actitud agresiva hacia las mujeres era en parte un reflejo de las tormentosas y fallidas relaciones sentimentales sostenidas por Jagger. En
Mother's Little Helper, Jagger y compañía describen la vida de una ama de casa que logra encarar los problemas y afanes de la vida cotidiana con la ayuda de medicamentos. La adicción a las drogas era tema delicado en el mundo del pop, y si la protagonista es una ama de casa, considerada como el corazón y núcleo de la familia, el asunto se convertía casi en tabú para la recatada sociedad inglesa. Tal vez por esa razón
Mother's Little Helper no fue lanzada como disco sencillo en tierras de la Reina Isabel, pero se vendió como pan caliente en las libertinas tierras del Tío Sam.
El álbum contiene también tonadas de acaramelada belleza como
Lady Jane, adornada con exquisitos sonidos de dulcimer, guitarra acústica y clavecín, dando como resultado un desenfadado coqueteo con el rock barroco que fue la envidia de grupos como
The Left Bank o
The Millenium. Las melodías agridulces también están presentes en los surcos del disco y ahí están como ejemplo
What To Do y
Take It Or Leave It. Además, huellas de música country y blues estadounidense son halladas con facilidad en la pieza
High And Dry. El rhythm and blues, blues y rock and roll son ingredientes notorios en la música de
It's No Easy, una canción poco valorada por los incondicionales de
Keith Richards y compañía pero que en realidad es una de las mejores del disco. En dicha pieza el cantante llega a la conclusión de que es difícil sobrevivir por tu cuenta cuando tu mujer te ha abandonado a tu suerte, cual perro maloliente. Esos sentimientos ambivalentes y contradictorios acerca de la mujer, expresados a lo largo del disco parecen conducir al laberinto filosófico de que no puedas vivir con ellas, pero tampoco sin ellas.
Flight 505 comienza con un solo de piano que entreteje notas bluseras, las cuales sorpresivamente se convierten en una reminiscencia de
Satisfaction, dando entrada a la batería de
Charlie Watts y al resto de la banda.
Flight 505 no hace referencia a la avioneta en que
Buddy Holly perdió la vida como muchos creen, sino al temor a volar. En
It's No Easy,
Doncha Bother Me,
Out Of Time y en otras piezas del disco se escucha el sonido grave, zumbante, como de un avión bombardero en picada, que parece ser un bajo eléctrico al que
Bill Wyman ha añadido un pedal de distorsión.
Keith Richards se hizo cargo de las partes principales de guitarra en las sesiones de grabación pues
Brian Jones parecía indispuesto durante periodos largos de tiempo, gracias al exceso en el consumo de extrañas sustancias químicas. A pesar de estar librando constantes batallas contra sus propios demonios internos, Jones tuvo el ánimo suficiente para realizar las aportaciones más importantes, incorporando al sonido del grupo instrumentos como la marimba en
Under My Thumb y
Out of Time; el sitar en
Mother's Little Helper y
Paint it, Black; y el dulcémele en
Lady Jane así como en la infravalorada
I'm Waiting. De esta manera Brian Jones dejó en claro que era el músico más brillante e imaginativo del grupo, pero también el más volátil, impredecible y menos confiable.
Al principio la banda quería que el álbum fuese titulado
Could You Walk On The Water?, pero la disquera aborreció la idea.
Los Rolling Stones también planearon que el disco tuviera funda desplegable de lujo y que incluyera un cuadernillo de 6 páginas con fotos de la banda, tomadas a todo color durante su más reciente gira por Estados Unidos, pero los miopes ejecutivos de Decca no quisieron ni oír hablar del tema. Algunas canciones grabadas durante las sesiones de diciembre del '65 y marzo del '66 quedaron fuera por falta de espacio, como
Ride On Baby, y
Sittin' On A Fence, siendo insertadas con calzador más tarde en discos recopilatorios como "Flowers" y en caras B de discos sencillos. Publicado por el sello Decca en Inglaterra, el álbum alcanzó con rapidez la posición número 1, aunque en Estados Unidos quedó atorado en el número 2, sin lograr desbancar a
Rubber Soul de
The Beatles. Las criticas hacia
Aftermath no se hicieron esperar: algunas personas opinaron que el álbum era una abierta e inaceptable agresión hacia las mujeres, mientras que otras consideraron que los autores se limitaron a describir con exuberante nitidez los valores retorcidos dentro de una decadente sociedad machista. Es cierto que Jagger y Richards muestran inconsistencia en las letras a lo largo del disco y tuvieron que rellenar espacio descaradamente al incluir "Goin' Home", una canción recordada más por su duración de 11 minutos que por su contenido, pero también dieron prueba fidedigna de que estaban progresando y esa evolución musical a largo plazo les aseguró la supervivencia hasta nuestros días.